El equipo integrado por Tomás Villalón, Jorge Pavic Arquitectos y Altos Arquitectos (Francisco Moure y Fernando Domínguez) se adjudicó el primer lugar en el concurso de anteproyectos del colegio The Antofagasta British School en Chile.
Según explican los autores, el proyecto "propone un ordenamiento donde la lectura binaria y complementaria de masa y vacío se hace fundamental. La condición de borde edificado en torno a los vacíos, permite diferenciar los cuatro ciclos del proyecto educativo en piezas autónomas e integradas al ordenamiento del conjunto".
Memoria oficial:
Un patio se compone de materia y vacío.
Como el desierto. De aire y tierra.
Como el peso. De gravedad y ligereza.
Son estos opuestos los que parecen certeros a la hora de acercarse a este paisaje. Pensar en esculpir y modelar la tierra para hacer un nuevo suelo.
Esta premisa parece una pequeña verdad irrefutable: para acentuar la vida en un contexto agresivo, vale la pena el resguardo, la protección, tomar la idea de refugio como una máxima incuestionable.
Por lo mismo, ante la geografía, imaginar un asentamiento más que un edificio parecía certero. Una ciudadela más que un cuerpo monolítico y monumental, parecía otro principio valido.
El comienzo es este.
Conformar una pequeña ciudad en el paisaje, donde la cualidad y singularidad estuviera en el dialogo de los pesos de la tierra, y la ligereza del interior. La idea de un sistema construido, que permita generar vacíos, patios, espacios de resguardo del sol, el viento, el polvo. En torno a ellos, la vida activada por los bordes perimetrales que tributan activamente el vacio interior horadado.
Es sencillo finalmente: el patio es simplemente un dialogo de un vacío con un perímetro edificado. Un espacio que en los pucará correspondían a cuerpos semienterrados, resguardados, como costras herméticas hacia el sol y el diserto, y abiertas hacia la interioridad construida por esta simple decisión arquitectónica.
Orden
El orden es la vida misma en una geometría.
Como tal, debe ser simple y compleja a la vez: simple para alojar su función, y compleja para alojar la vida.
Precisar esa geometría como la huella de las costumbres, de los hechos, las vivencias y discrepancias, parece ser el alcance de mayor dificultad. Para ello el ordenamiento no es más que un tejido simple y ortogonal, pero a su vez, es un tejido intrincado, como una ciudadela, como un asentamiento en el territorio que permitiera fracturar una gran pieza en diversos lugares distintos y concatenados.
El vacío, de esta manera, es una red que permite hilvanar patios, umbrales, escaleras y terrazas en un continuo ininterrumpido, donde los distintos niveles de interioridad permitirán diferenciar los grados de intimidad de los espacios del proyecto.
Como factor siguiente, el terreno como pieza topográfica define el posicionamiento de los distintos cuerpos arquitectónicos. Cada pieza, entendida como un peso terrestre y macizo, se comprende como un eslabón en el tejido ascendente, estructurando un apilamiento en descalce, que permite aminorar la escala del proyecto en la pendiente natural del suelo.
Los distintos cuerpos macizos, se posicionan semienterrados, compartiendo suelo y aire, como macizos horadados en el cerro que se comprimen mediante el apilamiento y el descalce.
La disgregación, el apilamiento y el descalce, permite mirar el mar mediante vacíos estratégicos, logrando amortiguar la escala del edificio en un contexto domestico, generando distintos niveles de interioridad en una diversidad anhelada por su condición de asentamiento territorial.
Uso
El proyecto para Colegio Antofagasta British School, propone un ordenamiento donde la lectura binaria y complementaria de masa y vacío se hace fundamental. La condición de borde edificado en torno a los vacíos, permite diferenciar los cuatro ciclos del proyecto educativo en piezas autónomas e integradas al ordenamiento del conjunto.
Cada ciclo tributa un espacio colectivo distinto, cada uno con un umbral diferente, un interior con una atmósfera especifica, y cada uno con un sistemas de ascensión acorde a la edad del usuario.
Los distintos vacíos se vinculan mediante umbrales a un espacio continuo paralelo al mar, que articula los 4 ciclos en un zócalo mirador, el cual contiene las tres piezas maternas del proyecto educativo del Antofagasta British School. El conocimiento, los valores artísticos y científicos, y la integración deportiva.
El zócalo, articula una secuencia de plazas temáticas mediante una sucesión de umbrales en un recorrido que integra los accesos al auditorio, casino y gimnasio, y a su vez, las relaciones cruzadas y alternadas con los diferentes ciclos, todos ellos en diferentes niveles.
Estructura y materia
Volumen horadado de hormigón armado
Un sistema de cuerpos sólidos de hormigón armado en tonos tierra, permite disponer de un espesor duro y rocoso hacia el desierto, un cuerpo hermético que logra controlar el sol, la polución, el viento y la arena, permitiendo el nacimiento de un interior templado y controlado de la intemperie.
El escalonamiento apilado de los cuerpos, se propone como un asentamiento horadado en el suelo, una ciudadela que abre una concatenada red de espacios públicos hilvanados desde la secuencia de patios que conforman el eje educativo del colegio.
El fraccionamiento de las partes, permite una propuesta modular, de piezas hilvanadas y diversas que ajustan su escala al formato domestico de su contexto inmediato.
Hacia el interior, las salas y programas de apoyo, podrán abrirse con mayor libertad, controlando la exposición a la radiación, pero permitiendo el vinculo de los espacios educativos con los patios, plazas y terrazas.
Paisaje
Cada vacio se propone como una atmosfera distinta, con especies locales, pero suelos y relaciones diversas. Cada uno de estos patios será una experiencia particular, tanto a nivel de configuración de paisaje, como a nivel de equipamiento para sus usuarios.
El sistema de encastre del colegio con el territorio, busca emplear suelos y lineas de paisaje local, con la idea de vincular la arquitectura a la materia orgánica que define la singularidad de su contexto.
Eficiencia energética
El proyecto propone una envolvente pétrea y opaca en base a muros de hormigón armado, para liberar un vacio interior templado, proveedor de luz natural y ventilación en todos los recintos del proyecto.
La condición de zócalo mirador del predio, propone una estrategia mixta en la envolvente norte, estableciendo una fachada abierta hacia el mar, pero protegida por medio de un tejido profundo de hormigón armado, que permite controlar la radiación al interior de los recintos, permitiendo vistas a la ciudad y el territorio
Desde el punto de vista activo, paneles fotovoltaicos y colectores solares proponen un aporte sustantivo para lograr generar de manera autónoma energía para el funcionamiento del conjunto.
Arquitectos
Tomás Villalón, Jorge Pavic Arquitectos, Altos ArquitectosUbicación
Antofagasta, Antofagasta Region, ChileAltos Arquitectos
Francisco Moure, Fernando DominguezPremio
Primer LugarMaquetas
Leonardo SalgadoRenders
Leonardo QuinterosÁrea
11000.0 m2Año Proyecto
2016Fotografías
Cortesía de Equipo Primer Lugar